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Esta es la consigna que dio el padre obispo Fernando Croxatto a los 27 jóvenes que están rumbo a Lisboa –Portugal-, para participar de la Jornada Mundial de la Juventud 2023. En la oportunidad también se celebró la III Jornada Mundial de los Abuelos y los Mayores, por lo que se vivió un gesto de comunión entre los participantes de los distintos grupos etarios.

El sábado 22 de julio, la Diócesis de Neuquén conmemoró la III Jornada Mundial de los Abuelos y los Mayores, y en coincidencia se celebró la Misa de envío de los jóvenes que viajaron a Lisboa, Portugal para participar de la Jornada Mundial de la Juventud 2023.

El padre obispo Fernando Croxatto, acompañado por el padre Oscar, vicario de la Parroquia María Madre de la Iglesia (del Barrio Alta Barda), celebraron la Misa que convocó a adultos mayores y jóvenes de la comunidad neuquina, entre los que se destacaron los jóvenes que representarán a la Iglesia neuquina en la Jornada Mundial de la Juventud 2023.

Durante la homilía el padre obispo Fernando invocó a todos los presentes: “No te dejes vencer por el mal. Vence al mal a fuerza del bien”, dijo y agregó “no te canses de hacer el bien, se paciente”, e instó a que dejemos que “Dios sea quien en definitiva termine juzgando las cosas. No te hagas vos juez de la vida y las cosas”, expresó.

En otro punto dijo que “nuestra vida es una conversión permanente”, y recalcó que, como cristianos, nuestro objetivo es “alcanzar el modo de Dios, el actuar de Dios, creer profundamente en él y amar a ese Dios”, llamando a que “nuestra vida trate de traducir lo que la palabra nos va queriendo decir lentamente en nuestro corazón”.

Y se refirió a la Jornada Mundial de los Abuelos y Mayores, y a la Jornada Mundial de la Juventud como “signos concretos de esa buena semilla que Dios nos está invitando a poner”, instando a: Por un lado, “reconocer el valor del abuelo, del mayor en nuestras vidas, tenerlo presente, acoger su palabra y su historia”, y a “orar por esos jóvenes que se convocarán en Lisboa, para que la esperanza de los abuelos pueda continuar viva en sus corazones… Sostengan esa esperanza”.

La Jornada Mundial de la Juventud se celebra este año en Lisboa, Portugal, del 2 al 6 de agosto. Convocará a más de 500 mil jóvenes de diferentes partes del mundo. De Neuquén son 27 los jóvenes que viajarán, todos de distintas parroquias de la ciudad de Neuquén y del interior de la provincia.

Durante la celebración el padre obispo Fernando insto a los jóvenes neuquinos a “abrir el corazón grande para escuchar lo que el Espíritu Santo quiere sembrar entre ustedes para luego sembrar en la Diócesis”. Y en un gesto de comunión de ambas jornadas celebradas, convocó a los jóvenes presentes, a elegir a un abuelo –de los presentes también en la misa-, para escucharlos y llevar sus intenciones a la Virgen de Fátima.

Por último, invitó al grupo de viajeros a pasar al frente, bendijo las remeras que los identificarán en el encuentro mundial, y llamó a la comunidad a “rezar por ellos”. Al tiempo que bendijo a cada uno, les recordó: “Van en nombre de todos nosotros. Sean buena semilla con todos los que se encuentren”.

El lema de esta Jornada Mundial de la Juventud 2023 es “María se levantó y partió sin demora”, y es bajo esa misma consigna que los 27 jóvenes que viajan en representación de la Diócesis neuquina, se prepararon durante este tiempo.

El objetivo es disfrutar y encontrarse con otros jóvenes, y compartir la fe con jóvenes de otros países, culturas, idiomas; “un sueño cumplido”, para todos ellos. La preparación del viaje tiene su origen, hace cuatro años, con la participación de Pablo y Suyay, ambos provenientes de San Martín de los Andes, quienes oportunamente viajaron a la jornada que se realizó en Panamá en el 2019.  

Pablo dijo que la idea original fue “dejarle algo a nuestros hijos y qué mejor que esta jornada, vivirla todos juntos en familia”, objetivo que se fue ampliando con la ilusión de otros jóvenes de su parroquia, llegando la invitación a la Diócesis de Neuquén. Económicamente, el viaje tiene un alto costo, pero fue “a través de mucho esfuerzo, rifas, eventos, y con el acompañamiento de las comunidades”, que se logró llegar al monto esperado, comentó Suyay.

Luciano y Lilén, dos de los jóvenes que viajan, coincidieron en manifestar que viven estos días previos “con muchas ansias y felicidad, siempre esperando en la Fe y esperando lo mejor”. En cuanto a los jóvenes que no pudieron viajar, los invitaron a sumarse para la próxima: “Se puede, es difícil, pero no imposible”, y agregaron que “No bajen los brazos, siempre se puede, trabajando, todo se da (…) no es imposible, si es de Dios, se va a dar”, afirmaron.  

Por último, el padre Oscar, dijo que estas jornadas son “una experiencia de ser Iglesia, encontrarse con jóvenes de todo el mundo que viven y creen en lo que nosotros creemos”. Y envió un mensaje a las familias neuquinas “lo que traemos es para todos (…) recen por nosotros, llevamos a toda la Diócesis, siéntanse participantes de este gran evento”.

A toda la comunidad neuquina que quiera vivir la Jornada, se los invita a seguir las redes: https://www.facebook.com/iglesiacatolicaneuquen – Diócesis de Neuquén y el Instagram: @rumbo_lisboa_nqn . En donde se dará cuenta de lo que los jóvenes vivan día a día.